Si en nuestro último post hablábamos sobre mi pasión por Málaga, mi querida ciudad, hoy nos vamos a ir a un paraíso que está a miles de kilómetros de distancia y que hemos tenido la suerte de conocer en primera persona: las idílicas Islas Perhentian en Malasia. Un lugar donde uno va a relajarse, a disfrutar del sol, de sus playas de aguas turquesa, de sus mágicos atardeceres y de sus extraordinarios fondos marinos, uno de los más ricos del planeta. ( os recuerdo que ya publicamos un artículo sobre el snorkel en las islas Perhentian). A tirarse a la bartola que diria mi abuelo y a no hacer nada.
En fin, como en nuestro viaje a Malasia ya llevábamos algunas grandes ciudades, tocaba relax en una de las mejores islas del mundo para bucear, desconectar y hacer bien poco. Y como mis días allí fueron, a pesar de que íbamos a relajarnos, intensos y llenos de situaciones, os voy a dar algunos datos prácticos y algunas advertencias y consejos que os vendrán muy bien si decidís poner vuestras posaderas en las Perhentian, porque aunque sean un verdadero paraíso salvaje, también tienen su lado negativo.
Donde están
Las islas Perhentian están situadas al noreste de Malasia, en el estado de Terengganu, uno de los más conservadores del país y a unas 10 millas de la costa. Su belleza ha conllevado un cierto desarrollo pero aún conserva ese espíritu de lugar virgen, salvaje y poco frecuentado por el turismo de masas. En pocos lugares del mundo se pueden ver fondos marinos tan exuberantes, arrecifes de coral, peces exóticos, tortugas gigantes o se puede nadar con tiburones, en teoría, tranquilos e inofensivos. Las islas pertenecen al Parque Marino Nacional Pulau Redang por lo que la pesca, la recolección de corales o los desperdicios están prohibidos, aunque eso es teoría más que otra cosa ya que vi demasiada basura incluso en los fondos marinos. Antes de entrar al parque marino hay que pagar una tasa de 5 dólares, más el traslado en lancha más otros dos dólares porque te cambian de lancha antes de llegar a la isla. ¡Viva el turismo!.

– Como llegar y advertencias al reservar
Se suele llegar en avión a Kota Bharu, el aeropuerto más cercano a las islas y después por tierra hasta Kuala Besut. Nosotros tomamos un tren nocturno desde Kuala Lumpur ( 47 -53 euros y es importante reservar algún día antes en la estación central de Kuala Lumpur) que tardó 12 horas en llegar a la estación de Tanah Merah, lo más cerca posible de Kuala Besut, la localidad costera desde donde parten los barcos hacia estas paradisiacas islas. La verdad es que el trayecto fue bastante bueno, las camas no están nada mal y se puede descansar razonablemente bien. Un par de paradas antes de llegar a destino subió un tipo y hablamos con él de los precios de los taxis hasta el embarcadero ( casi 1 hora de trayecto) pero no concretamos nada. Al bajar del tren se nos pega como una lapa y al ver las pocas opciones disponibles, nos vamos en un taxi amigo suyo.
Una vez en Kuala Besut desayunamos y el tipo nos quiere vender los pasajes de barco, nos sigue hasta las agencias de viaje, nos agobia e incluso amenaza a las agencias que entramos para que no nos reserven hotel. Parece que todo hay que hacerlo con él. Lo mando a freir pimientos ya que la paciencia se me agota y sacamos el billete en lancha de ida y vuelta en una agencia local. Para dormir, las mafias no nos dejan reservar en ninguna agencia de Kuala Besut así que lo haremos insitu.
Cuando ir
Es importante saber en que fechas es posible ir a las Perhentian y en cuales es mejor olvidarse. El mejor momento para visitarlas va entre los meses de Abril y Septiembre, ya que en teoría el tiempo acompaña y es ideal para disfrutar del paraiso, todo lo contrario que entre noviembre y marzo, cuando el monzón hace su aparición y la mayoría de los alojamientos cierran debido al mal tiempo y la escasa afluencia de turistas. Para esas fechas es mejor la costa occidental de Malasia.
¿ Que isla elijo?
Una buena pregunta que será lo primero que tendrás que decidir cuando vayas. Las dos islas principales son Perhentian Kecil, la más pequeña, y Perhentian Besar, la más grande. En las islas casi todo es virgen y salvaje, no hay carreteras, la electricidad es a base de generadores y muchos hoteles ni tienen agua caliente. Básicamente y yendo al grano, en la isla pequeña hay alojamientos más baratos, más infraestructuras, escuelas de buceo, restaurantes, más fiesta y mucho mochilero. En la isla grande están los alojamientos más exclusivos, más caros, hay mucha más tranquilidad y es donde van muchas parejas o familias que buscan menos ruido y más intimidad. Vosotros mismos. Nosotros elegimos Kecil, la isla pequeña y concretamente la playa de Long Beach, donde hay más alojamientos baratos y ambiente. La parte oeste de Kecil, Coral Bay, también tiene tirón y es más tranquila que long beach e incluso en kecil hay resorts totalmente aislados en otras partes de la isla para los que gustan de ser robinsones. De todos modos moverse entre las islas no es complicado ya que siempre hay algún propietario de barca que os acercará a donde queráis a cambio de unos ringgits.
Fauna y flora
Uno de los fondos marinos más ricos del mundo ofrece al visitante impactantes imágenes bajo el agua, con arrecifes de coral, tortugas, tiburones de arrecife, peces payaso, barracudas y cientos de especies más que hacen que la experiencia bajo el agua sea inolvidable. En tierra verás lagartos de todos los tamaños, mosquitos para aburrir y macacos repartidos por la jungla.
Imprescindible
– Hacer un tour de Snorkel y nadar con tiburones o tortugas gigantes.
– Visitar otras playas menos visitadas de la isla ( a pie o en water taxi).
– Llevar crema solar y antimosquitos.
– Hacer una caminata por la parte oeste de kecil para descubrir playas de ensueño.
– Si te gusta el buceo, hacer un curso o inmersiones en sus fondos marinos.
– Ver un atardecer desde Coral Bay.
Consejos y precauciones
Como vi cosas que no me gustaron he pensado en recopilarlas para que vayáis prevenidos si algún día queréis disfrutar del paraíso. Un paraíso en donde, por cierto, trabajan algunos españoles que nos advirtieron y aconsejaron bien. Allá voy:
– El servicio en general de los trabajadores de la isla hacia los visitantes es muy mejorable. Vi actitudes negativas, pasotas, trato hosco y menosprecio al turista. Que no te agasajen como en otras partes del mundo lo entiendo pero tampoco puede ser que vayan con chulería y arrogancia ( aquí lo de la sonrisa al turismo no lo conocen).
– Cuando llega la noche hay que tener cuidado, sobre todo si eres mujer y viajas sola. Tuvimos una experiencia muy extraña con una chica alemana, a la que no volvimos a ver después. Los hombres de aquí, el alcohol y sus miradas y gestos hacia las mujeres extranjeras no me gustaron en absoluto ( de hecho leimos en la Lonely Planet casos de desapariciones y abusos a mujeres….).
– El escaso wifi que llega a la isla es malo e intermitente. La mayoría de los alojamientos no lo ofrece y los que sí lo tienen, se aprovechan de ello subiendo precios y cambiando la contraseña para que no abusemos de él.
– No hay cajeros en las islas así que lleva el suficiente dinero en efectivo para no pasar apuros.
– Mentalizate de que por la isla hay bichos, insectos, lagartos y como no, mosquitos.
– Es un país musulmán y hay que respetar sus creencias. El topless está absolutamente prohibido.
– La basura y los desperdicios están muy controlados y cada día son sacados en lanchas de las islas. Aun así, vi zonas muy sucias, abandonadas y poco cuidadas.
– Los mejores precios de snorkel están en Coral Bay, y los mejores precios de alojamiento están en long beach.
– Me dio pena ver basura en los fondos marinos. La propia guia los iba recogiendo mientras hacíamos snorkel.
– El alcohol es caro aunque fácil de encontrar en la isla pequeña. En la isla grande hay pocos lugares donde lo sirven.
– Hay un sendero de unos 10 minutos que une long beach con Coral beach, al oeste de Perhentian Kecil.
– Lleva linterna porque de noche se ve bastante poco.
– Cuidado con los robos en las playas solitarias.
– Pon atención al pasear por las playas ya que las anclas de los barcos y las mareas son muy traicioneras y puedes tener algún percance.
– Hay pequeños peces muy territoriales y se dedican a dar mordiscos a los incautos curiosos que, como nosotros, invadimos cada día sus aguas.
– Paciencia a la hora de comer que aquí son muy muy lentos. De hecho no te traen ni la cuenta en muchos sitios, y hay que ir a pagar a la caja.
– Solo hay una clínica y está en Kecil village, la pequeña población al sur de la isla pequeña donde vive la gente local.
Hasta aquí la información práctica y algunas recomendaciones que no hay que olvidar si decides ir a las Perhentian, una verdadera joya de isla pero a la que hay que ir tomando ciertas precauciones ya que tiene sus puntos oscuros. En próximos artículos hablaremos de donde dormir, donde comer y que hacer en este edén tropical. Y recuerda, vas a un paraíso sin lujos ni comodidades donde la naturaleza salvaje y virgen es la que manda pero que a cambio te regala algo que pocos lugares ofrecen: disfrutar de uno de los mejores destinos de playa y buceo del mundo.

Oscar 23 marzo, 2015
Hola! Yo estuve en Perhentian a principios de octubre del año pasado y no tuve ningún problema, de hecho pasé unos días muy relajados y me trataron genial, y lo hice todo por libre.
Puedes leer el post que escribí en mi blog por si te interesa en http://www.persiguetusuenos.blogspot.com.es/2014/10/islas-perhentian.html Saludos!