Recorrer parte de Croacia en coche y en una semana ha sido algo demasiado estresante por lo corto y lo difícil que ha sido para mi elegir lo que iba a visitar ya que Croacia tiene tantos atractivos que dan para muchos días por allí. Pero el tiempo, mi mayor enemigo en los viajes, me hizo tener que decidir para acoplar mis 7 días a un viaje express en coche. Después de leer y de algunos consejos de amigos viajeros, tuve claro que una de las visitas sería el Parque Nacional de Krka, una maravilla de la naturaleza que todo el mundo quiere ver a pesar de no ser tan famoso como los Lagos de Plitvice. Un edén natural donde la naturaleza de toca y donde puedes respirar aire puro además de darte un refrescante baño.
Aun así, el mayor «pero» que se le puede poner a esta impresionante zona natural es la cantidad de gente que hay en los meses de verano. No obstante, merece mucho la pena conocer esta belleza Kárstica y darse un chapuzón en las aguas esmeraldas del río Krka.
Donde está y como llegar
Krka está situado en la provincia de Dalmacia, muy cerca de Sibenik y al norte de Split. Fue nombrado Parque Nacional en 1985 y para llegar a estas preciosas cataratas hay varias formas pero creo que la más fácil es tomando un barco desde la localidad de Skradin a la que se llega facilmente en coche por la carretera ( autopista E65 y luego la nacional 56). Si prefieres el autobús, hay transporte público desde Sibenik hasta Skradin.
Mi experiencia
Primero fue asombro, cabreo e incredulidad por la cantidad de gente que allí había y con el paso de los minutos la sensación fue mejorando ( menos mal porque la primera impresión fue muy dura). Llegamos en coche a la localidad de Skradin ya que nos habían recomendado entrar por este lugar ( hay 5 entradas al parque ). Aparcamos el coche en uno de sus parkings ( 5 euros ) y andamos 15 minutos hasta llegar al lago y a la zona de las taquillas con una cola impresionante ( 25 euros la entrada al parque con ferry de ida y vuelta). Los barcos regresan llenos de turistas y los van dejando para volver a llevarlos lago arriba donde están las cascadas. 1 hora de espera nos llevó.
Después de 30 minutos de travesía, el abarrotado barco llegó a su destino y cuando vimos la de gente que allí había casi me echo a llorar. Pero no quedaba otra que hacerse fuerte a las pies de un árbol y dejar nuestras pertenencias para darnos el primer baño. Me sentó de maravilla. Por cierto, no olvidéis los escarpines que hay mucha roca debajo del agua.
Cuando miras las magníficas cascadas se te olvidan las hordas de criaturas que aquí yacen y se bañan, volviendote uno de ellos. Incluso intenté cruzar la pasarela para empezar el recorrido a pie pero era imposible así que decidimos comer en el restaurante al aire libre. No es que sea una maravilla pero la fuente de pescado que nos zampamos nos supo a gloria a la hora que era. ( un poco caro, 20 euros por persona). Varios pescados de la zona a la plancha, patatas fritas y una especie de patatas a lo pobre riquísimas.
Ya con los estómagos llenos y de mejor humor ( el comer siempre alivia), nos dispusimos a hacer el recorrido por las pasarelas y por el río Krka. Es una caminata fácil y sin complicación aunque el calor era quizás lo peor del día. Las imágenes que se van sucediendo son de postal, verdaderamente espectaculares y es una delicia el paseo rodeado de naturaleza, cascadas y ríos. Ese color verde esmeralda de las aguas es tan hipnótico que el paseo se hace muy corto. Un paseo donde se ven muchos peces y con suerte ( nosotros no la tuvimos) águilas, halcones y algún que otro mamífero.
Al regresar del recorrido tuvimos que darnos un nuevo chapuzón por el calor que pasamos y después de nuevo en ferry para Skradin, previa espera de 30 minutos. Cuando la tarde avanza, la gente se va disgregando hasta llegar a unos pocos turistas ( recordad mirar los horario del último ferry). La zona me ha encantado a pesar de la cantidad de gente presente, sobre todo porque es el único Parque Natural de Croacia donde te puedes bañar. Y eso, en el caluroso mes de julio croata, es de agradecer.
Consejos
- Ve temprano para no esperar muchas colas.
- Es difícil entrar y salir del agua ya que no hay accesos construidos.
- Bañador y escarpines para los pies.
- Toalla y ropa de muda.
- Lleva tu propia comida o come en el restaurante o en los puestos de comida rápida.
- Sólo está permitido el baño en la cascada final, en ningún otro lugar del parque.
- Deja el lugar como lo encontraste.
Más información
Precio del Parque: 25 euros barco incluido.
Su web: http://www.np-krka.hr/en/

Johan 9 noviembre, 2017
Que bonito lugar ¡¡¡ me encanta como lo plasmas en palabras e imagenes ¡¡¡